Rudy Rodriguez suspendido provisionalmente por HISA

La Autoridad para la Integridad y Seguridad en las Carreras de Caballos (HISA por sus siglas en inglés) ha impuesto una suspensión provisional al entrenador Rudy Rodríguez después de que un funcionario judicial dictaminó que los cargos presentados contra el entrenador por no proporcionar la atención veterinaria adecuada representaban riesgo para el bienestar de los caballos.
La medida tomó vigencia inmediatamente desde una notificación enviada a los abogados de Rodríguez y publicada en el sitio web de la HISA y la misma durará hasta que el caso sea juzgado formalmente, lo que ocurrirá en cuestión de semanas.
Rudy Rodríguez, de 53 años de edad ha ganado 1677 carreras durante sus 15 años como entrenador de purasangres, la mayoría de ellas en New York donde radica su actividad profesional. Ha obtenido o compartido 13 títulos en hipódromos de la New York Racing Association (NYRA). Antes de dedicarse a la preparación de caballos ejerció como jinete vencedor en 221 carreras entre 1992 y 2010.
Fue acusado a finales de noviembre de infringir una norma que establece en parte que: “no se privará a los caballos de los cuidados, el sustento, el refugio o la atención veterinaria necesarios” relacionada con la falta de registros o pruebas de tratamiento de 15 caballos que habían sido incluidos en la lista veterinaria desde el 22 de noviembre de 2024, así como de un decimosexto caballo que sufrió una lesión mortal en Aqueduct en noviembre de este año. Tres de los caballos acondicionados por Rodríguez que habían sido incluidos en esa lista veterinaria sufrieron posteriormente lesiones mortales.
Según artículo publicado por Matt Hegarty para el Daily Racing Form este martes 16 de diciembre, Armand Leone, funcionario encargado de la audiencia, afirmó que la HISA había “demostrado motivos fundados” para solicitar la suspensión provisional, ya que Rodríguez “no había cumplido con el nivel de cuidado exigido a un entrenador y había puesto en peligro el bienestar de sus caballos”. Leone basó su fallo en pruebas y testimonios presentados en la audiencia celebrada el 12 de diciembre.
Se refirió específicamente al testimonio sobre el cuidado de un caballo llamado Secret Rules (Secret Circle), que fue incluido en la lista del veterinario regulador el 14 de diciembre del año pasado, no superó una prueba de entrenamiento el 11 de enero y luego sufrió una lesión mortal durante un entrenamiento el 19 de enero. Según ese testimonio, durante todo ese tiempo Secret Rules nunca fue diagnosticado a pesar de la recomendación veterinaria de que se le efectuara una evaluación.
Leone refirió: “Los riesgos inaceptables de lesiones graves o muerte por el hecho de que el demandado no hiciera examinar a sus caballos por un veterinario tras ser incluidos en la lista veterinaria causaron la lesión catastrófica de Secret Rules”.
Por otra parte el abogado de Rodríguez, Clark Brewster, quien también es propietario de caballos, argumentó durante la audiencia que la HISA no había demostrado que los caballos no hubieran sido evaluados o tratados, ya que las normas no exigen que los comprobantes de evaluación se introduzcan en su portal de registros veterinarios.
Brewster declaró: “Una evaluación puede dar como resultado que no se encuentre ningún problema médico y, por lo tanto, no se establezca ningún diagnóstico”, según el resumen del informe del argumento de Brewster. “Las normas sólo exigen que se introduzcan en el portal los tratamientos, procedimientos o cirugías”.
Brewster y Rodríguez, en su propio testimonio, también negaron que se hubiera privado de la atención veterinaria a ninguno de los caballos. Brewster proporcionó registros de 100 tratamientos veterinarios para 16 caballos, según el informe del funcionario de la audiencia.
“Todos los caballos entrenados por el demandado fueron evaluados de forma rutinaria para detectar cojeras y otras afecciones médicas”, escribió Brewster. “A ninguno se le negó la atención”.





