Preguntas y Respuestas con: Junior Alvarado

El año 2025 ha sido muy especial en la vida profesional y personal del jockey venezolano. Siendo en la actualidad el más destacado representante de los látigos que cumplen campaña en Norteamérica nacidos en el país suramericano, Alvarado comparte con nosotros las respuestas ante las interrogantes que le planteamos sobre diversos temas.
Con 40 años de edad, Junior Rafael este año se convirtió en el cuarto jockey de Venezuela en triunfar en el Kentucky Derby G1 y lo hizo sobre el lomo de Sovereignty (Into Mischief), un nombre que resuena para futuro candidato al Caballo del Año, pues el título de Campeón Tresañero debería ser para él, por su notable desempeño.
Más de 2,200 victorias en dieciocho años de campaña en Estados Unidos tiene Junior Alvarado. Su nombre está asociado a la tenacidad, el esfuerzo y por supuesto al éxito. Los invitamos a conocer más de este atleta latinoamericano en las siguientes líneas y gracias a la conversación que tuvo con nuestro CEO Roberto “El Potro” Rodríguez:
Después de que superas la lesión que tuviste y que por poco te deja fuera del Kentucky Derby, ¿Cómo puedes definir lo que has logrado desde ese entonces? ¿Es un renacer en tu carrera?.
“En lo personal puedo decir que es una hazaña. Siéndote sincero, los doctores no me dieron esperanzas de que yo llegara al primer sábado de mayo, con las condiciones de montarme sobre un ejemplar. El que yo haya podido llegar al Kentucky Derby es algo espectacular y de allí en adelante lo que ha venido después de esa carrera, fíjate que han sido hazañas en mi trayectoria. Es algo que uno lo sueña pero que, muchos atletas en este medio no logran cumplirlos. Un ejemplar tan especial para mi como es Sovereignty, no les llega a todos. Eso es algo que me ha puesto en un nivel superior al que tenía anteriormente y este potro ha hecho que yo llegue a lugares donde nunca he estado”.
Salvando distancias porque eran dos caballos diferentes, ¿Cómo podrías definir la fuerza que ha mostrado Sovereignty con la que tenía Cody’s Wish, ambos montados por ti?. ¿Tienen algo en común ellos que tu hayas notado?.
“Para mi ninguno de los dos caballos tienen relación. Son dos ejemplares totalmente diferentes, pero si te puedo poner un ejemplo: Cody’s Wish en la milla se gana a Sovereignty. Ahora, si los colocas en una carrera a dos curvas más allá de 1,600 metros, Sovereignty supera a Cody’s Wish. Cody’s Wish ha sido el mejor millero que yo he montado en mi carrera como jinete y era un ejemplar con una personalidad demasiado fuerte en competencia. Era lo que él quisiera, cuando y como él quisiera. No había manera de que tratara de hacer algo cuando el no quería hacerlo. Cody’s Wish era un caballo que si tu no lo entendías, te hacía quedar mal. En otro caso, Sovereignty es un caballo fácil y me he entendido muy bien con él. No es que no me entendía con Cody’s Wish, por entenderlo fue que le pude sacar el mayor provecho, pero Sovereignty se deja llevar. Lo que le falta es hablar y te deja saber en carrera cuando está listo y la fuerza que este ejemplar tiene para mantenerse en una milla y octavo, una milla y cuarto o quizás milla y media, no la posee cualquier ejemplar. Por ello es que es bastante especial.”
¿Cuál fue la estrategia con Scylla en la Breeders’ Cup Distaff? ¿Ya iban con un plan definido o viendo el panorama de como estaba la pista, tomaste la decisión de ir adelante y que te alcanzaran?.
“Teníamos la idea de que había tres o cuatro ejemplares en el papel con más velocidad que mi yegua. Bill Mott y yo pensamos que la posición era buena porque salíamos por dentro, ahorraríamos terreno y sacarle provecho. Jamas pensé que iba a estar en la delantera. Mott me dijo que si salía en velocidad como hace dos carreras atrás que estuvo con Prat, quizás viniera tercero. En el paddock, hablábamos con el Racing Manager (Juddmonte) y también pensábamos que entre el cuarto y el sexto ibamos a estar. Pero fijate, al abrirse las puertas la yegua salió con bastante intención y en lo que pasaron la meta por primera vez, fue algo de instinto donde dije: yo me voy. Son cosas de carrera donde así como me pudo haber salido catastrófico, esta vez me salió espectacular. Tomé la decisión a todo riesgo y si le preguntaba en plena carrera a Bill Mott que si agarraba la punta, nunca me hubiese dicho que sí. Es la libertad que yo tengo con él. Así como he cometido errores, en otras oportunidades he sacado carreras de abajo y creo que esta fue una de ellas, de tomar esta decisión que nadie la pensó. Muchos se quedaron fríos cuando vieron la carrera que estaba haciendo. La yegua iba cómoda, no estaba arrancada y al final sacó la clase. Ella por diferentes razones, no había podido llegar a este nivel de Grado 1.”
Desde que estás en Norteamérica, esta es tu décima cuarta temporada que pasas de 100 victorias pero a su vez, es la mejor en producción. ¿Cómo te sientes con estas cifras?.
“Estoy bastante contento con ese número y este año rompí el récord personal de ganancias en Estados Unidos. Si tomamos en cuenta el año donde yo gané la Saudi Cup, iría allí cabeza a cabeza con este, y todo eso ha sido en gran parte por el ejemplar Sovereignty, con el cual conquisté el Kentucky Derby que tiene $5 millones, los $2 millones del Belmont Stakes y $1,250,000 el Travers Stakes. Sovereignty me ha llevado a más de la mitad de la producción. Sigo aprovechando todo esto y cuando estás montando a un ejemplar como Sovereignty, mucha gente te quiere montar en otros caballos y se te dan más oportunidades.”
Hay muchos jinetes nuevos que ven en ti una figura de inspiración. ¿Qué mensaje tienes para aquellos que dan sus primeros pasos en esta complicada profesión y sueñan con lograr lo que tú has obtenido en tu carrera?
“Lo que ha funcionado en mi carrera es la dedicación y la constancia. Llevo 18 años montando aquí en Estados Unidos y no ha sido fácil porque he tenido muchas caídas que me han aguantado, pero el detalle es seguir. Si como jinete te dedicas a este deporte, tienes que saber que siempre hay muchas cosas malas que te van a mantener abajo que las que te van a mantener arriba, pero es la constancia la que algún día te llevará al nivel que siempre soñaste, el que siempre quieres estar. Eso es algo que pasa conmigo. A pesar de muchos golpes y muchas veces que yo estuve allá abajo, pero seguía dedicado sin nunca abandonar. Siempre pensé y confié en las habilidades que yo tengo. Nunca abandonen en los momentos díficiles. Gracias a Dios estoy viviendo ahorita un momento que siempre soñé.”





